viernes, 24 de agosto de 2007

Oda al clóset.



La gente se viste de diferentes maneras para expresarse. La moda es una forma de expresión. Si quieres expresarte, puedes vestirte de diferentes maneras. Hay personas que se expresan vistiéndose. Nuestra personalidad se expresa en la manera en como nos arreglamos y vestimos...... y por eso LaAL LAlLA lIAlalALlaLa. BalAha.
El punto es que no siempre este tipo de comentarios son bien pensados... me refiero a que ya es costumbre que salgan de la boca de las personas, incluyéndome a mi, a ti, y a la otra señora que lee este blog, sin ni siquiera darnos cuenta de lo que decimos. Y es que casi siempre Ud. abre los ojos y el clóset, y salta en el jean más conveniente, que cause menos estruendo, y una linda cosita que vaya encima, de manera que pueda parecer que se tardó 2 minutos vistiendo, cuando en realidad el proceso tomó hora y media.

Lo que a mi me apasiona y lo que hace que me piense las cosas mejor en cuanto a los trapos, pepas y pepitas que me hecho encima, es que la línea roja que recorre ese pañuelo que compramos en descuento, las mostacillas doradas que con delicadez cubren ese monedero, el bolsillo de la parte de atrás del pantalón que tiene forma de rombo, y las líneas de hilo blanco que con gracia dibujan un arabesco en la tela, en algún momento pueden significar un flashback para otra persona, algo que vimos en una película, una forma inspiradora que te hace pensar: "ojalá pudiese ser tan feliz como ella".

Una mujer viste completamente de negro, y de repente levanta el brazo, la manga se corre, y sale a la luz un brazalete particular, que consiguió en un viaje a tal o cual sitio, y así, una chica se levanta para ir a clases y usa una falda azul eléctrico con botas negras y una bufanda a rayas amarillas.. y más nada, no hay mega collares que te aturden, ni maquillaje que te ahogue, ni demasiados estímulos, una arquitecto usa unos jeans y unas sandalias de cuero con un camisa de franela que tiene "faralaos" y frunces en los sitios precisos, y ella y la otra, y la otra, y el otro, se sienten completamente cómodos y ninguno tiene nada que ver con el otro.

El verde brillante del tul que recorre una falda, puede significar tantas cosas. Puede significar que te levantaste, colocaste un buen disco, y pasaste un buen rato vistiéndote, puede significar que te gusta leer en las mañanas, y salir en las tardes, puede significar que quizá te gusta el jugo de naranja y un libro de Virginia Woolf, puede significar que estás enamorada, y más allá de lo que signifique, porque en realidad, puede que no tenga significado alguno, es una compañía... la manera en como nos acomodamos nos acompaña como un amigo fiel que no se va, porque es nuestro, y merece tanto respeto como cualquier otra cosa, porque como nosotros es (o debería ser) único.

No es entonces, superficial, ni frívolo, es una reverencia a lo que pensamos, sentimos y recordamos, a que alguna vez cuando teníamos 6 años queríamos parecernos a Jasmín de Aladino o a quien sea que querían parecerse ustedes, sean enfermeras, estudiantes, secretarias, gerentes, mesoneras, vendedoras, amas de casa o diseñadoras, gordas, flacas, altas o bajitas. Es hacerle justicia al hecho de que somos femeninas (con faralaos, flores o sin ellos)

Ahí está. Mi oda a... el cierre, el botón, al raso, y sobre todo, al ser sorprendidos en un mar de cosas obvias y objetivos evidentes.
Por eso yo paso horas de frente al closet.

4 comentarios:

Polux dijo...

interesante.


hahahahaha!


saludos!

Anónimo dijo...

preposición "a" + artículo "el" produce la contracción "al"

Julia Saume Márquez dijo...

Qué fino post

Gabrielita dijo...

Este post ha cambiado mi vida, crei que por pensar así me convertía en un ser vacío y banal. Pero lo dijiste todo tan perfecto que ahora llevaré mis delicadas transparencias con aquella falda violeta con la cabeza en alto.

Ah, y me releeré Flush de Virginia.

Saludos.

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